De todas las comas que he puesto, sobran veintidós. Hay puntos y comas que salen del teclado y trepan a sus hojas correspondientes, pero dudo si sustituirlos por un punto y seguido. Veo palabras que bailan, que se han escondido, que vuelan o se unen a otras. Leo mi historia por quincuagésima tercera vez -me enamoro de algunas sonoridades- y vuelvo a dudar. Elimino frases, escenas, diálogos. Me asaltan ganas de borrarlo todo y volver a empezar con lo que sé ahora. Nunca está bien, pero me obligo a pensar que la obra está como podía estar en ese momento del camino donde estaba yo. Decido dejarla así, decido la dedicatoria, decido los agradecimientos, decido la cubierta. Escribir es tomar un millón de decisiones, antes, durante y después.
Me asomo a una nueva etapa que poco tiene que ver con el solitario proceso de juntar letras con sentimiento y me da más vértigo que tomar en brazos a mi hija por primera vez. ¿Dónde se mete mi inconsciencia cuando más la necesito? Es ahora cuando aparecen los fantasmas de la desconfianza y la decepción, y solo puedo apelar a la clemencia de un lector cómplice y benévolo con mi falta de pericia y mis buenas intenciones. La primera obra sirve para crear la siguiente, me digo, para aprender y enmendar, para arrepentirse y crecer. En ella hay pureza, verdad, una ausencia de ambición, solo la presencia de crear y expresar, de explorar y hallar. El fracaso sería dejar de escribir. Pero quién fuera un genio para crear la magia de mostrar el alma propia sin dudar.
Aquí hay ciento setenta y seis páginas dentro de una cubierta luminosa, realizada con mucha paciencia y más amor por una de las personas más generosas que conozco, mi adorada amiga, casi hermana, @ady_cerv. ¡Gracias!☀️ Ocho capítulos, tres intros y un bonus track, todos con nombres de canciones que tienen algo que ver con la trama de las escenas, con lo que les ocurre a los personajes de Un sol particular.
Dentro, una historia contemporánea, una aproximación a la vida, por momentos cruda, pero también llena de sensibilidad. Hablo de la amistad, del paso a la vida adulta, del amor, de las personas tóxicas, de la importancia de quererse a uno mismo como una actitud para “arañar momentos de felicidad a la vida”. Solo espero que la leáis con cariño, que veáis en los personajes algo de lo que todos llevamos dentro y lleguéis al final con el ánimo esperanzador del protagonista.
Ha sido un camino muy largo, lleno de baches y curvas, pero el sol ha salido, como cada día, y ya es todo vuestro para que lo disfrutéis. Ahora únicamente puedo darle alas a esta criatura mía y dejar que se enfrente al mundo como mejor sepa, pero bien arropado. Espero que lo tratéis bien y os guste. Podéis pedirla en vuestras librerías y así ayudáis a todos, en Amazon y, por supuesto, en Editorial Libros Indie. Gracias siempre por leerme☀️☀️☀️